Generar y compartir un buen contenido es la base del marketing de contenidos. El primer paso para que la gente te encuentre, disfrute con él y se quede a ver qué le cuentas.
En las asesorías, suelo encontrarme el mismo problema: “¿Qué es un buen contenido?”, “¿Qué podría poner?”. Y mi favorito… “¿Pero eso no lo sabe la gente?”. ¡Pues no!
A continuación, voy a compartirte cómo crear una rutina para mejorar el contenido, seguir aprendiendo y sorprender a tus clientes. ¿Te apuntas? Te prometo que no solo son consejos sencillos, sino que lo vas a disfrutar.
¡Buscar nuevos temas! Tu ratito de paz
Posicionarte mejor en tu nicho y ser referente está íntimamente ligado a formarte. Busca, hoy mismo, fuentes, referentes de tu sector y medios para continuar aprendiendo.
Mi consejo es que te marques una hora a la semana para leer las newsletters, ver vídeos de Instagram o seguir a agencias de comunicación. De esta forma, verás mejor las tendencias de tu mercado, saber qué están haciendo marcas afines a ti.
En mi caso, dedico dos horas los viernes para leer todo lo que ha llegado al correo, sigo agencias y leo sobre marketing. Todo con un café rico.
Un Excel donde tomar apuntes de todo
Siempre debes tener un documento abierto en el móvil y en el ordenador. Ahí vas a apuntar todo lo que se te ocurre, temas que ves y te generan interés o ideas que deben ser desarrolladas.
Este documento, por un lado, te pondrá muy fácil elegir nuevas temáticas, crear un calendario de contenidos y mejorar lo que cuentas.
Por otro lado, tener ese documento te ayuda a no tener que recordar reportajes o que se te olvide ese artículo que viste o ese dato que ilustra una razón de compra.
Sigue, lee y habla con tu cliente
Las redes sociales son tu escaparate, así que nunca pierdas de vista lo que dice la gente al verte. ¿Qué impresión generas? ¿Qué frases siempre repiten tus seguidores? ¿Hay preguntas claves de las que puedes desarrollar un buen contenido?
Evalúa a las personas que te han comprado
No es negociable. Cuando termines un servicio o mandes un producto, tienes que conseguir que tu cliente te diga por qué te ha elegido a ti, cómo te conoció, si le ha gustado todo y qué aspectos debes mejorar para que tu servicio sea perfecto.
Espero que esta pequeña rutina te ayude a tener siempre temas, buscar nuevas fuentes y seguir creciendo junto a tu empresa.
0 comentarios